Porqué interesarse por la Defensa Psíquica



(...) A veces, sólo "aprendemos" a golpes, y sinceramente creo que este es el modo en que la mayoría de personas entran en contacto con lo que llamamos Defensa Psíquica. Podemos "salvarnos" del mismo modo en que le suena la flauta al asno de la fábula, y olvidar lo ocurrido esperando que no se vuelva a repetir; o aprendemos los medios necesarios para sobrevivir en este mundo que acabamos de descubrir ( aunque siempre estuvo ahí).


Forma parte del ciclo del conocimiento, primero aprendes, luego debes ser capaz de aplicar tal conocimiento de un modo efectivo; tal como uno tiene el derecho de recibir, adquiere el deber de dar. La primera necesidad, la urgencia, es evidentemente salirse del problema. Pero lo que considero más valioso, es entender el cómo lo hicimos y a qué nos enfrentamos, y ser capaz de responder nuevamente cuando sea necesario.

Creo que ese es en realidad el núcleo de la cuestión, reconocer el terreno que pisamos, y con qué estamos tratando. En ese punto surgen las dudas "útiles", no sólo acerca de las posibles soluciones de urgencia, sino acerca del modo en que nos explicamos y entendemos los fenómenos del mundo psíquico; del modo en que podemos compartir nuestro conocimiento al respecto con otros.


En estos años, básicamente a través de la red, se me han presentado casos en los que he tratado de aportar mi granito de arena, en base a mi propia experiencia. Todos tenemos la capacidad de defendernos, aún cuando sólo despierte y se ejecute en momentos de extrema necesidad. Pero este conocimiento venido de la intuición, o de un reflejo, es con frecuencia algo demasiado subjetivo, como para ser compartido. Es ahí dónde me he dado cuenta de la necesidad de establecer un lenguaje común, unos esquemas comprensibles, más allá de las particularidades de cada individuo.


Así que, cuando hablamos de Defensa Psíquica en realidad estamos hablando de un conjunto de conocimientos aplicables en relación a los fenómenos Psíquicos. Es un objeto de estudio válido en sí mismo, aún cuando no se llevara a la práctica.

 

La Defensa Psíquica nos atañe a todos



Algunas personas siguen estudiando latín, aún siendo lengua muerta, porque eso ayuda a desarrollar un pensamiento más ordenado. Sin embargo, no equiparable al caso de la Defensa Psíquica, puesto que ésta no es nada lejano, nada ajeno al humano común, y sigue tan vigente como el primer día.


El caso es que todos a diario nos exponemos a riesgos psíquicos, en diferentes niveles. Desde el hecho de subir al metro, hasta nuestras relaciones personales, con mención especial a las laborales. Aunque la mayoría de ocasiones de este rango no entren en la definición de "ataque", no dejan de resultar un peligro ante el que prevenirnos y, en ocasiones, defendernos.


Por lo que he visto, hay dos tipos de actitudes extremas en referencia al fenómeno del riesgo, abuso o ataque psíquico; una es considerarse constantemente "atacado", y la otra ignorar a priori la posibilidad de tal hecho: tan malo es enredarse en la paranoia, como ser negligente con el tema.


Es de lógica, pues, buscar una referencia que nos ayude a sopesar las situaciones. Y esa referencia no puede ser otra que nosotros mismos, y nuestro grado de lo que podríamos llamar "salud psíquica".


Entre el común de las gentes hay a menudo personas autodestructivas o meramente depresivas; si en alguna ocasión se sienten "atacadas", lo más probable es que el ataque lo hayan llamado ellos solos. Esto no quiere decir que no estén siendo realmente atacados, pero es como si un fumador va al médico quejándose de mala circulación, por más fármacos que se le receten, dejar el tabaco seria una pauta principal a seguir. Esto no cambia la importancia del problema; las personas que se ven fascinadas por lo nocivo, tienen, a mi entender, el mismo problema que cualquier adicto. Y necesitarán un tipo de tratamiento específico para lograr una cota normal de salud.


Ahora bien, por otro lado existe otro grupo de riesgo que son las personas que están metidas en prácticas del tipo mágico, o incluso llevando a cabo trabajos, o estando en posiciones que pueden resultar molestas para otros. Pueden estar perfectamente sanas psíquicamente, pero sería tan absurdo no tomar unas medidas básicas de prevención en estos casos como lo es no usar lo equipos de seguridad en los trabajos que así lo requieren.


La primera, y principal arma de Defensa Psíquica es uno mismo.



Vaelia Bjalfi, Diciembre 2005

Publicado en Foros Rojo Intenso